lunes, 9 de marzo de 2009

Lo que va del año

Al fin vuelvo a sentarme a escribir en este, mi descuidado blog. Fueron varios los empujones que recibí por medio de Dark Angel en mi correo, de no dejar de hacerlo y aquí estoy, esta vez un poco más sensible pero tímido también y la verdad no comprendo el motivo de este extraño sentimiento. Creo que en tres meses de año, más rápidos que de costumbre, han pasado infinidad de cosas de las cuales no me arrepiento porque de todo, bueno y malo, considero que siempre se saca una buena tajada y no hay problema que no tenga solución, ni siquiera ante la más cerradas de las percepciones.

La última vez que escribí acá fue el 31 de Diciembre del casi culminado 2008 en medio de una desesperación y una ansiedad, por un viaje que se aproximaba y un año que terminaba y me pateaba el culo, pero que merecía unos minutos de dedicación para homenajear lo sucecido.

Ese día por razones de la vida, uno de mis amigos, el anfitrión de la fiesta de año nuevo, se metió sin querer una sobredosis de cocaína...así que a eso de las 5am y después de haber hecho llorar a más de uno con mis palabras de año nuevo, me encontraba completamente ebrio en el carro, siendo bajado por la mamá de mi amigo para preguntarme por la sustancia que nos habíamos metido. En fin, yo algo había sospechado, por los gestos que le ví hacer, pero mi borrachera no me hizo reparar en aquello además qué me iba a imaginar que lo iban a encontrar en el baño convulsionando. El caso es que se lo llevaron para el hospital, el médico habló de lo afortunados que habían sido al haberlo llevado de inmediato al hospital porque su cuerpo no hubiera aguantado mucho. Eso fue el primero de Enero de 2009, felíz año el que comenzaba...

...pero en medio de todo sí fue bueno porque, de haber sucedido en otro espacio que no fuese su hogar seguramente habría terminado en un hospital pero no habría recibido escarmiento alguno, ni pena absurda por en medio de una fiesta con sus padres, amigos y familia caerse medio muerto a causa de un exceso, ni ganas de dejar de meter coca. Entonces en medio de la tragedia, algo bueno ocurrió. No lo mandaron a rehabilitación, y en varias ocasiones me tocó hablar con su mamá para explicarle mis argumentos de por qué consideraba que esas clínicas son una farsa para mí (y no pretendo acá ofender a nadie). El caso es que finalmente por medio de un psicólogo, y lo principal, autoreconocimiento de un error, la cosa hasta el momento va muy bien.

¿Por qué estoy hablando de esto? Preguntarán algunos, bueno, la razón es simple, y es que ante la adversidad o ante lo malo siempre hay algo bueno que rescatar, muchas veces nos quejamos y nos dedicamos a quejarnos de las cosas y nos apenamos de nosotros mismos por X o Y situación y no reparamos en lo bueno que puede haber detrás de esta. Considero que toda situación mala o desfavorable tiene su lado bueno.

Bueno, eso fue el primero de Enero, luego estuve de viaje en lo que considero fue el paraíso, desconectado, lastimosamente no del todo pero sí en un 99% y recorriendo una y otra ves pasajes por entre la selva, la montaña y el agua, algo asombroso. Cuerpos hermosos, gente estupenda, maravillosa y muy bella por doquier. Muchas parejas, mucha alegria, mucha tranquilidad, mucha paz.

Creo que siempre me he sentido débil al ver dos parejas, y lo que representan, más si se tratan de dos hombres. Creo que es de las cosas que en la vida considero más hermosas, para mí es un momento en el que solo son ellos y mis intrusos ojos. Algo un poco romántico pero que para mí es fabuloso, que me gozo y de lo cual ¿por qué no? me alimento un poco.

A la mitad del paseo tuve una recaida a causa del trago, entonces los últimos días los debí pasar a punta de jugos naturales y coca cola, pensando que para algo me serviría. Pero no, el tiempo y la pausa etílica me mejoraron, y la maluquera no fue nada agradable, pero en este momento estoy bien. Gracias. Una vez más, el límite y el escarmiento. Finalmente estuve unos días en Barranquilla, antes de volverme a Bogotá a seguir...¿la vida?

En fin, al llegar a Bogotá una serie de nuevas leyes, había invadido la ciudad a causa de un caido en combate en el gran rin del carulla de la 85 a donde iban, y no sé si seguirán iendo los pequeños delicuentes que hoy en día se educan a sí mismos y que nadie es capaz de juzgar por tratarse de menores de edad. En fin, para unosl o máximo, para otros fatal, pero particularmente sin ser un vándalo soy de las personas que disfruta mucho tomarse una cerveza sentado en la calle o en un andén. Ahora no lo puedo hacer, o no lo debo hacer, porque la misma ley que protege a un menor de edad y evita que se le juzgue o acuse como a un matón me pide que por favor no tome. ¿Debería hacer caso a esto? Sí, porque si no me voy preso, pensarán algunos, pero honestamente me sabe un poco a mierda. Murió un muchacho, dejaron de vender trago en la zona, el hospital se lavó las manos de una cagada que cometió y que al parecer a todo el mundo se le olvidó en medio de la nube de las drogas y el rock & roll. No podia ser peor mi regreso a la 'realidad'.

Mi cuarto se había convertido en un depósito de drogas tan bien escondidas que por más que lo revisaran y desarmaran una y otra vez no encontraban nada...
...nada salvo a un poco de libros de temática gay, homo art, condones, etc.

No sé en qué momento me declararon la guerra, pero bueno acá estoy y sigo en pie, y mandaré a la mierda a cuanta gente sea necesario para callarles la boca de una buena vez, esa gente a la que le gusta golpear por la espalda pero que de frente se quedan estupefactos y no son capaces de decir nada porque son unos cagados, a todos ellos en algún momento les llegará su hora, su momento, y no seré yo quien les pase la cuenta.

Ya veremos como sigue este nuevo año, yo honestamente me rindo ante la vida cada vez más rápida y sin sentido que nos toca o nos ha tocado vivir. Mientras que cuando niño un fin de semana se me hacía eterno, ahora ni la semana se me hace larga, es todo muy veloz, tan veloz que no se termina haciendo nada. Tan veloz que el poder de adquisición y de mayor valor, determina muchas cosas, el que más es el mejor según muchas personas.

Dos de mis grandes amigos, estarán de viaje por unos meses, y solo espero que pasen volando porque no puedo negar que a veces la soledad me golpea y muy duro. Espero que pronto pueda sentirme nuevamente acompañado, y rodeado de gente que vale la pena, no de cuervos, no de arpías.

Y no soy una persona de mucho odiar, contrario a lo que puede pensar mucha de la gente que lee sin leer este blog, pero hay cosas imperdonables, cosas que no se pueden pasar por alto...

...espero que a todos les esté iendo muy bien en este nuevo año.

Eso sí, agradezco la aparición de nuevas amistades que me han dado una mano y un apoyo inmenso a pesar de mi poco tiempo y disposición para vernos (ya le sonará conocido a Dark A.), pero que siguen ahí y no dejan de estar pendientes. Han sido un gran sostén y ánimo, honestos y coherentes.

No hablo mucho con la gente, pero siempre es rico llamar a un amigo, así hayan pasado meses y sentirse como en casa. Es muy hermoso, y es algo que siempre tengo presente, la gente que sin mucho alarde de verdad hace sentir lo especial de su ser, es gente que difícilmente se olvida y que fácilmente se perdona.

Este año está duro, durísimo, y espero poder llegar al final, para volver a echar la madre, solo que a veces me siento sin ganas de nada.

Nos veremos en una próxima ocasión.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Habiéndote tomado un receso de escritura, que dudo mucho, sino más bien de publicación, me permito decirte que me hacia mucha falta saber de ti por este medio.

Espero que todo vaya muy bien, las drogas hay que saberlas manejar finalmente el control sobre ellas lo tiene uno pero aún así es un juego en el que se puede salir muy mal librado. ¿No?

Leaf dijo...

Me alegro de que hayas vuelto por aquí, y de que estés sano y salvo, caballerete.

Estoy de acuerdo con Tomás en lo de las drogas. Hay que saber administarlas. Pueden ser una experiencia enriquecedora, pero no deben esclavizarnos: debemos ser nosotros los que decidamos cómo, dónde, cuándo y con quién, pero sin depender de ellas.

Oz Vega dijo...

Conocido.... si, muy conocido...
curiosamente quiero hablar con alguien en estos momentos, estas en linea, pero no respondes!
bueno
solo te dejo una frase de sabina para aplicarle a mi humanidad actual:
"Excepto las de la imaginacion, habia perdido todas las batallas..."
saludos desde mi lejana galaxia, aunque hoy sea Oz quien hable por mi

Potter dijo...

Es una coincidencia el haber llegado a tu blog, fue siguiendo algunos rastros que lo encontre... sin embargo como el destino es una perra arpia las coincidencias son... eso!
En el ultimo post el tema es un espejo mas de esos que siempre la familia y los amigos le ponen a uno en la cara para uno verse reflejado.
De todas maneras animo, y trata de postear como van tus cosas, trata de sentir que si vale la pena muchas de las cosas por las que aveces uno sin querer inspira en otros.

Esta limonada espero no este muy amarga!

Saludos